
Guerrero salvó al combinado peruano – EFE
Un perfecto cabezazo de Paolo Guerrero mediado el segundo periodo desatascó a su equipo ante Haití en un choque en el que Perú fue de menos a más, tras mostrar dudas en algunos tramos del encuentro.
Pese a que Perú no hizo un gran encuentro, su victoria fue merecida, ya que su rival apenas apareció en ataque, aunque si consiguió que los peruanos no se sintieran cómodos.
Lo mejor para Perú fue el resultado tras un encuentro poco brillante en el que cualquier otro marcador habría complicado mucho sus aspiraciones de acceder a cuartos de final.
Pese a ello, los primeros minutos de juego transmitieron la sensación de que Perú iba a encontrar con cierta facilidad el camino de la victoria porque su dominio fue intenso ante un equipo haitiano que no entró en el partido con la intensidad esperada.
Sin embargo, pasados los diez minutos de juego, el encuentro había dado un giro notable, ya que, por una parte, desapareció la fuerza inicial del equipo de Ricardo Gareca y, por otra, su rival se asentó sobre el terreno de juego.
Perú perdió el control del partido y aunque recuperaba con cierta facilidad la pelota, sus jugadores no eran capaces de conducirla con precisión hacia las proximidades de la meta de Placide.
No encontraba el conjunto peruano la forma de dominar con autoridad la zona ancha por errores propios y también por el fútbol intenso y presionante de su rival, al que le faltaba mostrar peligro en las aproximaciones a la meta de Pedro Gallese.
Haití: Johny Placide, Reginald Goreux, Romain Genovois, Mechack Jerome, Kim Jaggy, James Marcelin, Max Hilaire (Jean Marc Alexandre, m.40), Kevin Lafrance, Jeff Luis, Duckens Nazon (Keervens Belfort, m.71) y Wilde-Donald Guerrier.